La comunicación es clave: hablemos de nuestros deseos abiertamente
La clave para dominar el cunnilingus es hablar con tu pareja sobre lo que le gusta. Pregúntale directamente qué le gusta y cómo le gusta que le toquen. No seas tímido: la comunicación abierta dará como resultado un sexo mucho mejor para ambos.
Establece el estado de ánimo
Empiece por crear el ambiente adecuado. Atenúe las luces, juegue Música y velas encendidas: cualquier cosa que ayude a tu pareja a relajarse. Practicar sexo oral es algo muy íntimo, por lo que es fundamental crear un espacio íntimo.
Empieza despacio
Una vez que estés lista para comenzar, hazlo lentamente. Bésale primero los muslos, el estómago y la zona vaginal. No te lances de golpe. Provócala un poco y genera expectación. Cuando empieces a lamer y chupar, hazlo con suavidad.
Preste atención a su lenguaje corporal y Sonidos para determinar qué se siente mejor. Cada mujer es diferente, por lo que la clave es explorar y experimentar.
Concéntrese en el clítoris.
Para la mayoría de las mujeres, el clítoris es la zona más sensible y la principal fuente de placer. Lame y chupa suavemente el clítoris, variando la velocidad y la presión. Prueba a hacer círculos con la lengua alrededor del clítoris o a tocarlo rápidamente con la punta de la lengua.
Pídele a tu pareja que te dé su opinión sobre lo que más disfruta. Con el tiempo y la práctica, te convertirás en un experto en el cunnilingus.
La clave para dominar el cunnilingus y convertirse en un maestro en el dormitorio es comunicarse con su pareja, tomarlo con calma y concentrarse en brindarle placer.
Sigue su ejemplo, presta atención a sus señales y nunca dejes de explorar: esa es una forma segura de convertirte en un profesional del cunnilingus y brindarle a tu pareja orgasmos alucinantes una y otra vez.
Crea el entorno adecuado para ayudarla a relajarse
Para asegurarte de que se divierta, crea el ambiente adecuado. Baja las luces, enciende algunas velas y pon su música favorita. Un ambiente relajado la ayudará a sentirse más cómoda para abrirse a ti.
Mantén la habitación abrigada. ¡Nadie quiere pasar frío estando desnudo! Asegúrate de que la temperatura sea agradable para que ella pueda concentrarse en tu tacto en lugar de temblar bajo las sábanas.
Ofrece un masaje con aceite perfumado para liberar tensiones.
Masajea suavemente su cuello, hombros y espalda. Pregúntale si tiene algún punto dolorido que necesite atención adicional. Ella apreciará tu consideración y un masaje es una excelente forma de juego previo para excitarla y ponerla de humor.
Tranquilízala con cumplidos.
Susurra lo hermosa que es y lo mucho que la deseas. Elogia su cuerpo para ayudarla a sentirse a gusto. Di cosas como: "Tu piel es tan suave" o "Tienes las curvas más sexys". Tus palabras relajarán sus inhibiciones y aumentarán su confianza en ti misma. soportándolo todo por ti.
Establezca contacto visual, sonría y participe en bromas o coqueteos divertidos. Un poco de risa y La diversión puede hacer maravillas para mejorar los niveles de comodidad en momentos íntimos. Mantén un lenguaje corporal entusiasta y una sonrisa cálida y genuina para transmitirle tu placer al prodigarle atención.
Con práctica y paciencia, mejorarás cada vez más en el cunnilingus. Pero incluso los maestros siguen aprendiendo: el cuerpo y los deseos de cada mujer son diferentes. Así que mantén abiertas las líneas de comunicación, sintoniza con su placer y relaja su cuerpo y su mente.
Será como masilla en tus manos, lista para recibir la dicha que tienes guardada. ¡Ahora puede comenzar la verdadera diversión!
Los juegos previos lentos y sensuales generan anticipación
Baja el ritmo y no tengas prisa. Tómate tu tiempo para explorar el cuerpo de tu pareja con las manos y la boca. Comenzar con juegos previos sensuales generará expectación y ayudará a que se relaje para la experiencia.
Besar, tocar y provocar
Dale besos suaves en los labios, la cara, el cuello y la clavícula.Masajea suavemente sus hombros, brazos y torso. Pasa las yemas de los dedos suavemente por su piel. Los movimientos estimulantes estimulan las terminaciones nerviosas y activan los centros de placer en el cerebro.
Centrarse en las zonas no genitales
La vulva y el clítoris son extremadamente sensibles, así que dedica tiempo a estimular otras partes del cuerpo primero: acaricia la parte interna de los muslos, la parte baja de la espalda y los senos. Haz círculos con la lengua alrededor del ombligo o a lo largo de los huesos de la cadera.
Estas sensaciones indirectas aumentarán la excitación y harán que el contacto genital sea aún más placentero cuando llegue el momento.
Escuche los comentarios
Presta atención al lenguaje corporal y los sonidos de tu pareja. Observa qué le hace respirar con más dificultad, retorcerse o gemir de placer. Sigue haciendo más de lo que provoque respuestas positivas. Pregúntale si está disfrutando de lo que estás haciendo. Escucharle confirmar que le gusta algo puede ser una enciendelo para ambos
Aumentar la tensión
A medida que aumenta la excitación, estimula suavemente la zona alrededor del clítoris y la vulva antes del contacto directo. Haz círculos con la lengua o pasa los dedos por los bordes sensibles de estas zonas. Sopla aire tibio sobre la piel humedecida o desliza la mejilla por la parte interna del muslo. Si prolongas la anticipación, el primer toque del clítoris resultará electrizante.
Si se hace bien, los juegos previos prolongados dejarán a tu pareja deseando una estimulación más íntima. Si mantienes las cosas lentas, sensuales y atentas, tu pareja se sumergirá en un estado de excitación dichosa, lista para recibir la estimulación. El placer total de tu lengua experta. Tómate tu tiempo: las recompensas de la gratificación retrasada valdrán la pena para ambos.
Domina el arte de la estimulación oral
Una vez que hayas aprendido los conceptos básicos, es hora de perfeccionar tu técnica y convertirte en un experto en el cunnilingus. La clave para dominar el sexo oral es estar atento a las respuestas de su cuerpo y mantener una línea de comunicación abierta.
Empieza despacio
No te lances directamente a lamer y chupar. Dale besos suaves en la parte interna de los muslos y luego ve avanzando lentamente hacia el clítoris. Al principio, lame y acaricia suavemente el clítoris, evitando el contacto directo. Poco a poco, ve generando expectación y ayúdala a relajarse con la experiencia. Cuando esté deseando más, centra tu atención en el clítoris.
Centrarse en el clítoris
El clítoris es el centro del placer y la zona erógena principal. Lame y chupa suavemente el clítoris, prestando atención a su lenguaje corporal y a sus gemidos para determinar la cantidad adecuada de presión y velocidad. Pasa la lengua por el clítoris, hazla girar por los lados y el capuchón, e intenta succionarlo hacia la boca.
Usa tus manos también
Mientras tu boca está ocupada, usa tus manos para estimular otras áreas sensibles. Acaricia sus muslos internos, aprieta sus pechos y pezones o introduce uno o dos dedos en su vagina. La combinación de sensaciones la volverá loca. Curvar tus dedos para acariciar su punto G en un movimiento de “ven aquí” mientras lames su clítoris es una técnica probada y verdadera.
Obtener retroalimentación
La mejor manera de convertirse en un experto en sexo oral es obtener comentarios de su pareja sobre lo que más disfruta. Pregúntele cómo se siente, si quiere que vaya más rápido o más lento y si desea ejercer más o menos presión.
Podría pagar Presta atención a las señales verbales y no verbales, como su respiración, los movimientos de cadera y los gemidos. Haz del cunnilingus una experiencia colaborativa para que puedas aprender a darle el mejor placer.
Con práctica y paciencia, mejorarás cada vez más en el cunnilingus. Pero incluso los maestros siguen aprendiendo: el cuerpo y los deseos de cada mujer son diferentes. Así que mantén abiertas las líneas de comunicación, sintoniza con su placer y disfruten juntos de esta experiencia íntima. Antes de que te des cuenta, serás un experto en cunnilingus.
Experimente con diferentes técnicas y presiones
Hacer sexo oral a una mujer es una forma de arte y, para convertirte en un verdadero artista, necesitas practicar. No tengas miedo de experimentar con diferentes técnicas para ver cómo responde.
Comienza con movimientos amplios con la parte plana de la lengua y luego continúa haciendo círculos alrededor de su clítoris solo con la punta. Pasa la lengua por la punta de su clítoris o muévela de un lado a otro como un limpiaparabrisas.
Una vez que encuentres algo que le guste, sigue haciéndolo hasta que gima. Pero también sigue variando la presión y la velocidad. A algunas mujeres les gusta un toque suave y delicado, mientras que otras prefieren una presión firme.
Intenta succionar su clítoris suavemente o tómalo en tu boca y sostenlo entre tus labios mientras lo mueves con tu lengua.
Presta atención a sus señales para determinar qué es lo que más le gusta. Si respira con dificultad, gime o mueve las caderas, ¡sigue haciendo exactamente lo mismo! Cuando esté cerca del orgasmo, mantén un ritmo y una presión constantes.
Mantén las mismas técnicas y la misma velocidad. La constancia es vital para llevar a una mujer al límite.
Algunas mujeres también disfrutan de la penetración mientras reciben sexo oral. Desliza suavemente un dedo dentro de ella y muévelo en un movimiento de “ven aquí” para estimular su punto G.
Empieza con un dedo y luego añade otro si ella quiere más placer. Adapta el ritmo de tus dedos al de los movimientos de tu lengua en su clítoris. La combinación de sensaciones puede llevarla al éxtasis orgásmico.
La clave para dominar el cunnilingus es la práctica. Para que las cosas sigan siendo interesantes, experimenta continuamente variando las técnicas, la velocidad y la presión y probando nuevas posiciones.
Presta mucha atención a sus comentarios, tanto verbales como no verbales. ¡Con práctica regular, en poco tiempo le darás orgasmos alucinantes!
Preste atención a las señales de su cuerpo
Cuando le haces sexo oral a tu mujer, su lenguaje corporal es... Es fundamental que le indiques qué es lo que a ella le gusta. Busca señales verbales y no verbales que le indiquen que le gustan tus acciones.
Los gemidos, la respiración agitada, los movimientos de cadera y los apretones de muslos son buenas señales de que has encontrado el punto ideal.
Mira sus manos
Observa hacia dónde van sus manos: si agarra las sábanas con fuerza, te agarra el pelo o se toca, sigue haciendo exactamente lo que estás haciendo. Toma la indirecta si te aparta la cabeza, disminuye la velocidad o te lleva a otro lugar. Ella conoce su cuerpo mejor que nadie, así que sigue su ejemplo.
Empieza lentamente
Comienza con besos suaves en la parte interna de sus muslos antes de pasar a su vulva. Separa suavemente sus labios externos con tus dedos y besa y lame alrededor de la entrada de su vagina. Presta atención a sus sonidos y movimientos para descubrir qué es lo que más disfruta. Avanza lentamente hasta llegar a su clítoris, la parte más sensible.
Centrarse en el clítoris
Una vez que hayas generado expectación, concéntrate en su clítoris. Tira suavemente hacia atrás del capuchón del clítoris y haz círculos con la lengua alrededor del clítoris. Según su respuesta, comienza con una presión suave y aumenta la velocidad y la intensidad.
Pase la lengua por el clítoris o chúpelo suavemente. Nunca toque el clítoris directamente con los dedos, ya que podría ser demasiado intenso.
Mantenga un ritmo constante
Cuando ella responda positivamente, mantén un ritmo y una presión constantes. No cambies de técnica a menos que ella indique que quiere algo diferente. A medida que se acerca al orgasmo, su clítoris se volverá muy sensible, así que ten cuidado de no aumentar la intensidad. Mantén la constancia para llevarla al límite.
Prestar mucha atención a las señales de su cuerpo durante el sexo oral es Es fundamental maximizar su placer. Siga su ejemplo, comience despacio, concéntrese en los puntos calientes y mantenga un ritmo constante.Haz de su placer tu máxima prioridad y ella rogará por más.
Traiga dedos, juguetes u otros accesorios
Una vez que hayas cogido un buen ritmo y ella esté disfrutando, es hora de pasar a otro nivel. Desliza lentamente y con suavidad uno o dos dedos dentro de ella mientras sigues lamiendo y chupando su clítoris.
Empieza con un solo nudillo y observa cómo responde. Si empuja contra tu mano o gime pidiendo más, desliza tus dedos hacia adentro. Más profundamente y comience a masajear su punto G con un movimiento de “ven aquí”.
Utilice juguetes para mayor diversión.
También puedes introducir un pequeño vibrador o consolador. estimular su punto G Mientras sigues trabajando su clítoris con la boca, aplica lubricante al juguete y deslízalo suavemente hacia adentro, aproximadamente 5 pulgadas de profundidad, inclinándolo hacia su ombligo.
Gira o empuja el juguete mientras lames su clítoris para disfrutar de sensaciones alucinantes. Según sus comentarios, comienza siempre con la configuración de vibración más baja y aumenta gradualmente la intensidad.
Juego anal (opcional)
Si disfruta de la estimulación anal, un tapón anal es una excelente manera de duplicar su placer durante el sexo oral. Aplica lubricante al tapón e inserta suavemente solo la punta mientras lames su clítoris.
Haz una pausa para que su cuerpo se adapte a la sensación y luego deslízalo lentamente más profundamente mientras ella se relaja. El tapón anal presionará contra su punto G, creando una estimulación intensa. Empuja o gira suavemente el tapón mientras continúas lamiéndola.
La clave La forma de traerle los dedos, juguetes o accesorios es comenzar lentamente, comunicarse con ella sobre lo que disfruta, prestar atención a su lenguaje corporal y nunca forzarla.
Aunque las sensaciones pueden ser nuevas e intensas para ella, la práctica de sexo oral siempre debe ser para su placer. Si se hace correctamente, con cuidado y consentimiento, agregar extras al sexo oral puede llevar su experiencia a un nivel completamente nuevo. Pero siempre priorice su comodidad.
Haz que su placer sea la prioridad
Cuando le hagas sexo oral a tu pareja, haz que su placer sea tu máxima prioridad. Concéntrate en su lenguaje corporal y en sus sonidos para orientarte sobre lo que le gusta. Presta atención a su respiración, a los movimientos de cadera y a los gemidos.
Si arquea la espalda o te agarra el pelo, es señal de que has encontrado un punto sensible. Tócala y explora esas zonas.
Tómate tu tiempo. No te apresures a lamer o chupar su clítoris de inmediato. Crea expectación besando y acariciando primero la parte interna de sus muslos y la zona alrededor de su vagina.
Usa tus dedos para separar suavemente sus labios externos y explorar los internos con tu lengua. Haz círculos y movimientos rápidos con tu lengua alrededor de su entrada y perineo.
Una vez que comiences a estimular su clítoris directamente, comienza lentamente. Lame y chupa suavemente los lados del capuchón del clítoris antes de exponer el clítoris.
Presta atención a sus señales para determinar la cantidad adecuada de presión y velocidad. Cada mujer es diferente en cuanto a la cantidad de contacto directo que puede soportar.
Evite hacer El error de lamer demasiado fuerte o vigorosamente de inmediato. Siempre se puede aumentar la intensidad, pero no se puede eliminar la incomodidad.
Usa las manos además de la boca. Mientras tu boca se centra en el clítoris, usa las manos para acariciar la parte interna de sus muslos, jugar con sus pechos y pezones o introducir uno o dos dedos en su vagina.
Enrolla tus dedos hacia arriba en un movimiento de “ven aquí” para acariciar su punto G y obtener más sensación.
Sigue hasta que ella alcance el orgasmo. No dejes de lamer y chupar su clítoris a menos que ella te lo pida. Muchas mujeres pueden tener orgasmos múltiples con el cunnilingus, así que sigue usando tu boca y tus manos para prolongar su placer y llevarla al clímax nuevamente.Haz de su placer tu prioridad y ella te recompensará generosamente por tus esfuerzos.
La clave para dominar el cunnilingus y convertirse en un amante generoso es centrarse en la experiencia de su pareja. Haga que su placer sea su máxima prioridad, preste mucha atención a sus señales, tómelo con calma, use sus manos y continúe hasta que esté completamente satisfecha. Siga estos consejos y ella le rogará que le haga sexo oral una y otra vez.
Preguntas frecuentes: respuestas a preguntas frecuentes sobre el cunnilingus
Entonces, ¿quieres convertirte en un experto en el arte del cunnilingus? Eso es genial. Hacer sexo oral a una mujer puede ser Es muy placentero para ambos miembros de la pareja si se hace correctamente. Pero hay algunos mitos y conceptos erróneos que es necesario aclarar primero.
Un mito común es que la lengua es la única parte de la boca que se utiliza durante la comunicación oral. estimulación. Esto no es cierto. Tus labios, dientes y dedos también juegan un papel importante. papel esencial en la estimulación.
Succiona, mordisquea y acaricia suavemente su clítoris y sus labios con tus labios. Roza suavemente sus zonas sensibles con tus dientes. Usa tus dedos para acariciar y penetrar mientras tu boca está ocupada en otras cosas.
Otro mito es que el cunnilingus debe imitar el acto sexual. De ninguna manera. El sexo oral tiene un ritmo y una técnica completamente diferentes. Empieza despacio con movimientos amplios de la lengua sobre sus genitales.
Presta atención a sus reacciones para encontrar los puntos que la vuelven loca. Concéntrate en lamer, chupar y masajear esas zonas. La penetración con los dedos puede ser parte del proceso, pero no debería ser el evento principal.
A algunos hombres les preocupa que su técnica no sea lo suficientemente buena o que ciertos movimientos que han visto en el porno no se puedan aplicar en la vida real. La clave es no pensarlo demasiado. Empieza por lo básico, ve despacio, escucha su cuerpo y ten un diálogo abierto.
Pregúntale directamente qué es lo que le gusta y cómo puedes hacerlo mejor. Cada mujer es diferente, por lo que las técnicas que utiliza una pareja pueden no funcionar con otra. Conoce sus preferencias particulares y pronto serás una profesional.
La verdad es que El cunnilingus es una habilidad que requiere práctica. Pero si evitas los mitos comunes, sigues estos consejos, te comunicas abiertamente y te concentras en su placer, estarás en el camino correcto para convertirte en un maestro de este delicado arte. Tu pareja te lo agradecerá; te resultará una experiencia gratificante.
Conclusión
Así que ahí lo tienen, caballeros. El cunnilingus es una habilidad importante que deben dominar para satisfacer verdaderamente a su amante. Tómense el tiempo para aprender su anatomía única. Descarta los mitos preconcebidos y concéntrate en escuchar las señales de su cuerpo. Con un poco de práctica y entusiasmo de tu parte, le estarás dando un placer oral alucinante en poco tiempo.
Recuerda que cada mujer es diferente, por lo que la comunicación, la paciencia y la voluntad de aprender son esenciales. ¡Sal y demuéstrale que quieres ser el rey del cunnilingus!